Y de nuevo heme aquí, como antaño o mejor dicho como siempre
Bajo la tenue luz de una vela, escondiéndome tras las palabras
Y nada digo…. Porque me gusta callar.

Pero en cada lánguido silencio,
involuntariamente revive un recuerdo perene
Y se ahoga un quejido, ese sueño infértil que muerde las entrañas
Que lacera el alma, pero que no mata,
Y que placer tirano el de volver,
Así como el asesino retorna al lugar del crimen
Con esa malsana pasión regreso,
sé que todo termina en el lugar justo donde empieza
Pero no sé realmente si deseo cerrar el círculo.

Y éste baile y caminar inverso me envenenan.
Aquí con ignominia saboreo el amargo romance con la noche
Hago el amor con el llanto y beso ansiosa su piel de seda
Sé que aún estoy viva, porque me pierdo
en el filoso brillo de sus pupilas.
Como ese papel que se consume, así perpetuando mis cenizas
En amnistía con mis traumas más secretos, siento el baño del
Alba crepuscular, desfallece la noche, y luego…

Apago la vela y duermo!





Por Diana L.R.A.
En monòlogo sin sonido ni direcciòn
11:30 p.m
25-04-2012
C.d. Guzmàn Jal


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